La ozonoterapia en cáncer de mama
El cáncer de seno, o más comúnmente conocido cáncer de mama, es un tumor maligno que se origina en las células del seno. Estás células cancerosas van poco a poco penetrando los tejidos circundantes, y en algunos casos de mayor gravedad, comienzan a propagarse formando metástasis en distintas partes del cuerpo. Esta enfermedad afecta casi en su totalidad a las mujeres, hay casos en los que también afecta a hombres de entre 60 y 70 años.
El primer síntoma que se suele presentar en esta patología es una masa o protuberancia en el seno. La misma suele dura y con bordes irregulares, normalmente no sele ser dolorosa. Aunque hay casos que puede presentarse de forma sensible a la palpación, blanda y de forma redondeada, es por ello, que siempre se recomienda asistir a un médico especialista al sentir algún tipo de protuberancia. Así también esta enfermedad produce cambio en el tamaño, forma o textura de las mamas o el pezón. Por ejemplo, se puede presentar enrojecimiento, agujeros o fruncimiento que luce como cáscara de naranja. Otro síntoma es la aparición de líquido en el pezón, que puede ser sanguinolento, de claro a amarillento o verdoso, y lucir como pus. También suele presentarse hinchazón de parte o de todo el seno (aunque no se sienta una protuberancia definida) y dolor en el seno o en el pezón.
Se da en algunos casos que el cáncer de seno puede propagarse a los ganglios linfáticos de las axilas o alrededor de la clavícula y causar una protuberancia o inflamación, aun antes de que el tumor original en el tejido del seno sea lo suficientemente grande como para poderlo palpar.
Las causas que pueden desencadenar en un cáncer de mama son varias, se estima que una de cada ocho mujeres sufre de esta afección. Entre de los factores de riesgo se encuentran:
• Edad y sexo: las mujeres mayores de 50 años suelen ser el grupo que mayor riego posee de padecer de cáncer de mama, dado que el riesgo aumenta a medida que se envejece. Los hombres tienen menor probabilidad.
• Antecedentes familiares: el riesgo es alto en personas que poseen familiares cercanos que hayan padecido cáncer de seno, o algún otro tipo de cáncer, como por ejemplo uterino, ovárico o de colon.
• Genes: las personas que poseen defectos en los genes BRCA1 y BRCA2, los cuales son los que normalmente producen las proteínas que nos protegen ante el cáncer. Las mujeres que poseen este gen defectuoso tienen hasta un 80% de probabilidades de sufrir de esta patología.
• Ciclo menstrual: tienen mayor riesgo aquellas mujeres que iniciaron tempranamente sus períodos menstruales, antes de los 12 años, o bien llegaron tarde a la menopausia (después de los 55).
Otros factores que pueden ser desencadenantes son:
• Consumo de alcohol: el consumo de más de 1 ó 2 vasos de alcohol al día
• Parto: Son más propensas las mujeres que no han tenido hijos o que tuvieron después de los 30 años.
• DES: Las mujeres que tomaron dietilestilbestrol (DES) para evitar abortos pueden tener un mayor riesgo de sufrir cáncer de mama después de los 40 años. Esta droga se le suministraba a las mujeres entre los años 1940 y 1960.
• Hormonoterapia: Usted tiene mayor riesgo de cáncer de mama si ha recibido hormonoterapia con estrógenos durante algunos años o más
• Obesidad: según algunos expertos piensan que las mujeres obesas producen más estrógeno, lo que puede estimular la aparición de este cáncer.
• Radiación: poseen mayor riesgo de contraer cáncer aquellas personas que han recibido radioterapia de niños o adulto joven para tratar un cáncer en el área del tórax. Cuanto más joven se haya iniciado la radiación y más alta haya sido la dosis, mayor es el riesgo.
Debe destacarse que el uso de implantes mamarios, el uso de antitranspirantes y el uso de sostenes con varillas no aumentan el riesgo de poseer cáncer de seno. Así tampoco existen pruebas de un vínculo directo entre el cáncer de mama y los pesticidas.
La ozonoterapia es una buena terapia para reforzar el sistema inmunológico en los pacientes que poseen cáncer de seno. En los casos donde se trata al cáncer con ozonoterapia, se administra a través de vía intravenosa o rectal, actuando sobre el organismo del paciente enfermo, dando como resultado una mejor calidad de vida y reduciendo los efectos secundarios. Esto se debe a la acción antioxidante que posee el ozono, activando el sistema enzimático y protegiendo así a las células sanas frente a la sobreproducción de radicales libres. También el ozono aumenta el transporte de oxígeno a los tejidos.
La ozonoterapia tiene múltiples blancos de acción, es oxigenante, germicida, regulador inmunológico, antiinflamatorio, analgésico y activa sistemas antioxidantes.